El uso de uniformes en una organización se ha constituido en una herramienta de marketing de alta recordación, ya que transmite a sus clientes confianza y credibilidad, una vez que refleja la imagen e identidad unificada de las empresas o negocios que interactúan constantemente con el público, contribuyendo con la imagen profesional de los empleados.
La implementación del uso de los uniformes debe ser de manera integral teniendo en cuenta que los modelos sean en versión masculina y femenina, previendo comodidad, épocas del año y entornos a los que estará expuesto; deben ser prácticos, en particular para los que trabajan con cargas horarias importantes, sin olvidar las normas de seguridad laboral.
La confección de los uniformes deben generar bienestar comodidad, deben ser de fácil mantenimiento y secado rápido que hace que se mantengan como nuevos por más tiempo.
La correcta elección del color es determinante para que los clientes se conecten emocional y psicológicamente de una manera correcta con una marca o una empresa y debe tenerse en cuenta la “psicología de los colores”, ya que los mismos pueden tener diferentes significados dependiendo de la cultura, la situación y la industria. Los colores oscuros darán sensación de elegancia y sobriedad, mientras que los colores vivos darán la sensación de practicidad.
Rojo: Un color imponente recomendado para empresas de carácter comunicativo u orientadas al campo de la tecnología.
Púrpura: Realza la elegancia de cualquier producto. Puede utilizarse en negocios de venta de artículos tecnológicos, salas de belleza, e incluso en negocios dedicados al área de finanzas y salud.
Azul: Inspira confianza, seguridad. Puede ser empleado en negocios que se dediquen al área de las finanzas, transporte, telecomunicaciones, energética e incluso hotelería y clínicas privadas de salud.
Amarillo: Inspira positivismo y su brillo particular atrae a los clientes; puede ser utilizado en el área de comidas y restaurantes.
Naranja: Puede ser empleado en negocios de venta de tecnología.
Café: Puede ser empleado en negocios de insumos y suministros textiles, e incluso en negocios de transporte y dedicados al área de agricultura y agro servicios.
Negro y gris: Representa el prestigio, valor. Es usado para mostrar una sofisticación clásica y puede ser empleado en negocios que requieran interacción directa con los usuarios y empresas corporativas de prendas de vestir, perfumería, joyas, e incluso en las áreas ejecutivas de la industria del transporte aéreo y terrestre.
Blanco: Es una buena opción para negocios dedicados a la salud y relacionados con cocina y niños.
Algunos de los beneficios del uso de uniforme laboral para una empresa son:
Proporciona un valor agregado y desempeña un papel clave, representa el nivel, estatus y situación de la empresa, aumenta la conciencia de los clientes hacia la misma.
Influye en la comunicación entre el personal y los clientes, contribuyendo con la imagen profesional y seria de los mismos.
Reconocimiento de los empleados, orden y limpieza dentro y fuera del área de trabajo.
Fomenta en sus trabajadores el sentido de lealtad y compromiso con la empresa.